Bienvenidos a una nueva saga. Las Crónicas de Bibi. Creo que tras leer este primer capitulo sabreís la trama básica. Creo que tiene personajes muy próximos y cercanos. Real como la imaginación misma. Atentos a las próximas entregas... xD. Espero os guste.
Era una calurosa mañana de un día uno de agosto de cualquier año y Bibi se había levantado con su habitual sonrisa en la cara. Había conseguido trabajo en una biblioteca. Ya había trabajado en otros lugares, pero ser bibliotecaria era una nueva experiencia. Sabía las cosas básicas que toda bibliotecaria tiene que saber (había estudiando muchas veces para llegar a ser lo que era).
Se estiró en la cama, todavía no había sonado el despertador asique tenía tiempo. Su ropa estaba preparada sobre la silla, y el tiempo que tardaba en ducharse y arreglarse lo tenía calculado. Mientras esperaba el ansiado sonido pensó en lo que tenía que hacer:
“En la biblioteca tengo que estar de 9 a 20:30, con un descanso de una hora para comer, ¿y luego cuando salga? ¡Ah sí! Quedé con Ana para tomar un café, hace tanto tiempo que no nos vemos”
El sonido del despertador le hizo salir de sus cavilaciones. Se levantó de un salto y con las zapatillas se dirigió a la ducha. Le pagaban por no hacer nada y sentarse delante de un ordenador. ¿Quién podía quejarse ante algo así? Era feliz.
Además tenía algo que siempre había deseado: Poder.
Cerró el grifo de la ducha. Su sonrisa cambió de amistosa a malvada. Ahora ya nadie podría detenerla.
Era una calurosa mañana de un día uno de agosto de cualquier año y Bibi se había levantado con su habitual sonrisa en la cara. Había conseguido trabajo en una biblioteca. Ya había trabajado en otros lugares, pero ser bibliotecaria era una nueva experiencia. Sabía las cosas básicas que toda bibliotecaria tiene que saber (había estudiando muchas veces para llegar a ser lo que era).
Se estiró en la cama, todavía no había sonado el despertador asique tenía tiempo. Su ropa estaba preparada sobre la silla, y el tiempo que tardaba en ducharse y arreglarse lo tenía calculado. Mientras esperaba el ansiado sonido pensó en lo que tenía que hacer:
“En la biblioteca tengo que estar de 9 a 20:30, con un descanso de una hora para comer, ¿y luego cuando salga? ¡Ah sí! Quedé con Ana para tomar un café, hace tanto tiempo que no nos vemos”
El sonido del despertador le hizo salir de sus cavilaciones. Se levantó de un salto y con las zapatillas se dirigió a la ducha. Le pagaban por no hacer nada y sentarse delante de un ordenador. ¿Quién podía quejarse ante algo así? Era feliz.
Además tenía algo que siempre había deseado: Poder.
Cerró el grifo de la ducha. Su sonrisa cambió de amistosa a malvada. Ahora ya nadie podría detenerla.
3 comentarios:
¿De quién se va a vengar? No me gusta la gente malvada a menos que esté de mi lado... ¿Conseguiste trasladar la biblioteca?
ya veo que bibli no para...par cuando la 2º entrega?¿
Uy, esto promete... :)
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